Ya va siendo hora de que os presente algunas de las recetas de mi madre. El viernes pasado fue el cumpleaños de mi hermano y, reunidos entorno a la mesa de la gran cocina de mis padres, nos dimos un festín de categoría. Nos encanta «picotear» durante horas y charlar sin las prisas propias de los días de diario. Entre los platos que nunca, y digo nunca (cumpleaños, santos, Navidades, etc.), faltan en la mesa de mi madre están estas zanahorias “aliñás”, cuya receta heredó de mi abuela Maruja, y que están tan buenas…
Parece mentira que con un ingrediente tan barato y accesible, y unos pocos condimentos que siempre tenemos en la despensa se pueda preparar esta delicia super sana y tan resultona. Está especialmente indicada para los amantes de las verduras y las especias.
En mi familia nunca han faltado las recetas especiadas “a tope” y las continuas alusiones a la cocina árabe propia de nuestros orígenes (mi abuela y sus hijos, mi padre y mi tía, nacieron en Larache, Marruecos). Así, hemos crecido entre coucous, harira, pinchitos y té con hierbabuena. Los aromas que desprenden estos platos siempre me transportan a mi niñez: Siempre me llevan a casa. Poco a poco iré compartiendo con vosotros algunas de estas maravillas para que también podáis disfrutarlas.
No hay mucho más que decir, más allá de que preparéis estas zanahorias tan sencillas, porque merecen la pena. Para mí son la escusa perfecta cuando tengo muchas en el frigórifico y hay que “abrir hueco” ¡Muy buen provecho a todos!
INGREDIENTES:
- 1kg de zanahorias
- AOVE
- 1 diente de ajo
- 1/2 cucharadita de comino molido
- 1/2 cucharadita de comino en grano
- 1 cucharadita de orégano
- 1 pizca de pimienta negra
- 1 y 1/2 cucharada de miel
- 1 y 1/2 cucharada de vinagre de vino
- sal
PREPARACIÓN:
Pelar las zanahorias y cortarlas en rodajas gruesas. Cocer en abundante agua con sal hasta que estén ligeramente blandas (pero no en exceso). Mientras tanto, picar el ajo muy pequeñito y preparar una vinagreta batiendo enérgicamente el aceite, la miel y el vinagre. Sobre las zanahorias aun calientes poner el ajo, el comino, el orégano, la pimienta, la sal y la vinagreta, mezclar bien y dejar templar. Se pueden meter en el frigorífico o servir templadas. Probadlas y escoged las vuestras.